Viaje a Pamplona.

España amaneció el viernes 3 de Diciembre sin saber al caos al que se tendría que enfrentar con la huelga encubierta de los controladores aéreos. Un tema que afectó también en el ámbito futbolístico y que tuvo como protagonista principal al Fútbol club Barcelona. Por todos es conocida la costumbre de Guardiola de viajar el mismo día de partido, pues bien ante la situación de incertidumbre que sufría el país entero, nadie podía asegurarles que saldrían aviones desde Barcelona en la mañana del Sábado, sin embaro Pep decidió no adelantar el viaje hasta Pamplona.

El Sábado aún no se sabía cuando la expedición blaugrana viajaría hasta Navarra, en diversos medios de comunicacíón aparecieron informaciones en las que se aseguraba que el partido se había aplazado hasta el domingo 5 de Diciembre a las 17:00 horas, sin embargo fuentes del equipo rojillo afirmaban que ellos no habian recibido confirmación alguna de dicho aplazamiento a pesar de todo lo que se decía desde la ciudad condal. 

Osasuna se negaba por tanto a dicho aplazamiento alegando que no existía ninguna razón por la cuál este se tenía que porducir. La RFEF había comunicado al Barcelona que el partido se aplazaba pero tras la negativa rotunda de Osasuna tuvo que rectificar basándose en que otros equipos como Sporting, Atlético de Madrid y Racing de Santander también tenían que realizar trayectos de gran distancia.

De esta manera el equipo de Pep se vió obligado a viajar a contrareloj para llegar a tiempo de jugar el partido, la incomparecencia media hora antes del partido se sanciona con la perdida del partido 3-0 y de tres puntos, sin embargo habían asegurado al Barcelona que esto en ningún caso se daría. El equipo de Guardiola llegó y ganó. Pero más que con el partido quédense con la frase :

-Nosotros estamos en un país llamado Cataluña y pintamos poco (Pep Guardiola, el filósofo)